Robert Mallet-Stevens

Nacido en 1886 y fallecido en 1945, Robert Mallet-Stevens se formó en la Escuela Especial de Arquitectura de París. En sus inicios, trabajó en el diseño de interiores y muebles, mostrando un fuerte vínculo con el estilo de Josef Hoffmann. Además, colaboró en el diseño de escenografías para películas como L’inhumaine de Marcel L’Herbier (1924), ayudando a difundir la arquitectura moderna.

La villa Noailles en Hyéres, Francia (1923-1933), fue una de sus destacadas creaciones. En colaboración con Pierre Chareau y Theo van Doesburg, logró un diseño fascinante. El jardín de la villa, utilizado en la película de Man Ray Les Mystères du Château du Dé (1929), fue diseñado por Gabriel Guévrékian.

En la década de 1920, Robert Mallet-Stevens se relacionó con De Stijl, diseñando pabellones para la Exposición Internacional de las Artes Decorativas e Industriales Modernas de París en 1925. Posteriormente, construyó varias viviendas en una calle de París que lleva su nombre (1926-1927), siendo considerado un manifiesto de la arquitectura moderna. Sus edificaciones se caracterizan por formas cúbicas, fachadas blancas y superficies horizontales y verticales bien definidas. Uno de estos edificios fue su propia casa y estudio, donde los elementos gráficos se extendían hasta el mobiliario interior.

Robert Mallet-Stevens fue también uno de los fundadores de la Union des Artistes Modernes en 1929. Su villa Cavroix en Croix, Francia (1929-1932), destaca por sus enormes dimensiones de 2.400 metros cuadrados, yuxtaposición de volúmenes y su atmósfera reminiscente de las composiciones pictóricas premodernas. En el centro, un cubo que alberga el gran salón está flanqueado por una escalera circular.

En resumen, Robert Mallet-Stevens dejó un gran legado en la arquitectura moderna y sus colaboraciones con otros artistas y arquitectos influyentes. Sus obras continúan siendo un ejemplo de innovación y sofisticación.